Editorial. La quimera de la sostenibilidad

Como la bestia mitológica que le da nombre, la quimera de la sostenibilidad está compuesta de partes tomadas de diversas áreas como la sociología, la ecología, la ingeniería y la economía, por citar solamente algunas. No puede ser de otra manera. El objetivo de la sostenibilidad, heredera en buena medida del concepto de desarrollo sostenible, es redirigir las trayectorias de los complejos problemas socioambientales para retrasar tanto como sea posible sus efectos más nefastos. Si esta parece una definición pesimista, es solamente porque no es racional ni técnicamente posible frenar esas trayectorias.  

La preocupación por el cambio climático y, en consecuencia, el compromiso de la UNAM con la sostenibilidad, cruzan los territorios, los conocimientos, los programas, los edificios y a la comunidad universitaria misma en todas direcciones. Si existen temas transversales en el quehacer de la UNAM, en todos los ámbitos, el del cambio climático y la sostenibilidad es un ejemplo paradigmático. Este número de UNAM Internacional presenta un panorama extenso, pero no exhaustivo (esa es una tarea imposible), de los esfuerzos que nuestra universidad realiza en todo el territorio nacional y mucho más allá para entender el cambio global, para permitir al país participar de una forma decidida en su control y para buscar las soluciones de mitigación y adaptación que requiere el desarrollo sostenible, tal como se piensa desde nuestras aulas, laboratorios, centros de investigación, zonas de conservación y casi desde cualquier lugar. 

La sección Encuadre incluye ocho textos de gran profundidad que cubren distintas áreas relacionadas con el desarrollo sostenible ante los diversos escenarios de cambio climático. Desde la revisión de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Agenda 2030, hasta la aplicación del conocimiento multidisciplinario propio de las ciencias de la Tierra, del ambiente, de la sostenibilidad y del desarrollo, queda claro, a través de la lectura de estas páginas, que enfrentamos gravísimos peligros, que la situación global se encuentra en los límites del accionar humano, pero que hay motivos para mantener la esperanza, si como sociedad logramos establecer las políticas adecuadas y tomamos las decisiones correctas, y que en ese escenario el papel de las universidades es primordial; especialmente el de la máxima casa de estudios de México. 

Ámbitos de gran importancia que no siempre están en la discusión sobre el cambio climático, encuentran en nuestras páginas espacio para su expresión: sus impactos en la salud; la forma en que agravan desigualdades como la de género; la contaminación lumínica nocturna que, a la vez que representa una medida del desarrollo relacionada con la capacidad productiva de las sociedades, afecta a la vida silvestre y a la fauna urbana, como también la posibilidad de estudiar el cielo nocturno y nuestra salud. Aún si resulta imposible detener totalmente el incremento de la contaminación lumínica nocturna o de cualquier otro problema socioambiental, sí podemos redirigirlo, reducir su tasa de aumento y mitigar sus consecuencias. 

Esta tercera entrega de UNAM Internacional ha reunido en sus diferentes secciones una colección de artículos y entrevistas que abordan problemas y soluciones diversas, como diverso es el problema de esta compleja quimera. De la contaminación lumínica nocturna hasta el aprovechamiento racional del agua; de los conocimientos tradicionales para enfrentar problemas de alimentación, hasta el desarrollo y manejo de estaciones de estudios multi e interdisciplinarios; del desarrollo de energías renovables a la aplicación de los conocimientos de la ingeniería en el reforzamiento de las estructuras en las zonas costeras; de la coexistencia de la fauna y los humanos en las ciudades —incluyendo un fotorreportaje de la Reserva Ecológica del Pedregal de San Ángel en Ciudad Universitaria— a la representación estética del deterioro ambiental urbano, o de la aplicación de las geociencias hasta las múltiples y también muy diversas medidas que emprende la UNAM para acercarse a la sostenibilidad, en las páginas siguientes se presentan reseñas y exhortos que conviene escuchar —o leer— como una muestra pequeña de la compleja realidad de la ciencia y la práctica de la sostenibilidad desde la UNAM. 

Destaca en estos textos la importancia de la inter y la multidisciplinariedad, así como la atención puesta en las preocupaciones sobre qué podemos hacer las personas “de a pie”, tanto para contribuir a detener el proceso de calentamiento global como para poder vivirlo sin sentir que cargamos con una culpa histórica… Todos estos temas quedan ampliamente planteados y discutidos en este número. 

En esta ocasión UNAM Internacional tiene poesía por partida doble y, como ya es costumbre, se incluyen colaboraciones que destacan el papel que cumple en nuestros días el intercambio virtual como estrategia de internacionalización académica, especialmente a través de la implementación de las metodologías COIL (aprendizaje colaborativo internacional en línea, por sus siglas en inglés). 

Creemos que el contenido de este número de UNAM Internacional no solamente ayudará a divulgar los numerosos esfuerzos que desde la UNAM se realizan en favor de un planeta que queremos que siga siendo habitable, pero también a entender dónde están nuestras responsabilidades y qué podemos hacer desde el lugar en donde nos encontremos.